Dolce & Gabbana deslumbra en Nueva York
Sí, Domenico Dolce y Steffano Gabbana lo han vuelto a hacer. Los diseñadores han vuelto a convertirse en lo más comentado de la semana y en trending topic mundial. Pero, ¿cuál es el motivo de tanto revuelo?
La firma italiana ha causado furor al presentar su colección de alta costura "Alta Moda" en un emplazamiento único: la Ópera Metropolitana de Nueva York.
Pero esto no es todo. No solo ha sido el emplazamiento elegido el motivo de la sorpresa. Al cambio de Milán por Nueva York hay que sumarle una larga lista de eventos organizados por la firma, con una duración de 3 días, desde el viernes 6 al domingo 8 de abril.
Estamos cada vez más acostumbrados a este tipo de actos, que muy lejos quedan de los sobrios y mesurados desfiles. Dolce y Gabbana ha encontrado una fórmula efectiva mediante la cual consigue sorprender continuamente a sus invitados.
Los reconocibles espacios escogidos para la celebración de dichos eventos y la convocatoria de estrellas y celebridades se han convertido en dos de las constantes con las que juega la firma de moda.
Sentimiento, emoción y una experiencia inolvidable. 3 de los cimientos sobre los que se sustenta su éxito.
Pero, pasemos a hablar de la dilatada agenda de los diseñadores en la Gran Manzana.
Para empezar, el viernes 6 de abril los italianos presentaron su línea de Alta Joyería. Como no podía ser de otra manera, acompañaron dicha presentación con un evento de lujo: una cena benéfica en la New York Public Library. La gran protagonista de la noche fue, sin lugar a dudas, la actriz Sarah Jessica Parker.
El sábado 7 de abril fue el turno de los modelos masculinos, con un show de Alta Sastrería Masculina.
Y el broche de oro lo puso el desfile de Alta Costura Femenina. El show del 8 de abril fue el más comentado. Actrices de Hollywood, supermodelos, artistas... Nadie se quiso perder el show celebrado en la Metropolitan Opera. La gran protagonista de la noche, Naomi Campbell. La modelo británica fue la encargada de cerrar el desfile, con un espectacular vestido y una corona en una evidente alusión a la Estatua de la Libertad, símbolo de la ciudad.
Ahora solo nos queda preguntarnos, ¿con qué nos sorprenderán los diseñadores italianos la próxima vez?
Lo que está claro es que de una forma u otra, la conmoción está garantizada.